Chile se enfrenta a un escenario energético en transformación con la creciente influencia de pequeñas instalaciones solares. Estas no solo están cambiando el panorama de producción de energía, sino que también están elevando los costos para los consumidores. Expertos sugieren que estas instalaciones podrían representar casi el 40% de la demanda eléctrica para 2025, lo que implica un desafío significativo para mantener la estabilidad de precios y la competitividad. Sin embargo, este crecimiento también representa una oportunidad para fortalecer la infraestructura y mejorar la eficiencia en la distribución de energía, asegurando que Chile siga siendo un líder en el mercado de energías renovables.

por c1861798